Martinez Wilhelmine
Fuente de la imagen La Gran Fragata y la Magnífica Fragata
En Gran fragata se asemeja a un enorme mirlo que planea perezosamente en el cielo. Las fragatas pertenecen a la familia Fregatidae, que cuenta con cinco especies en todo el mundo. En las Galápagos hay dos especies: la fragata grande y la fragata magnífica. De las dos, la fragata grande es la que tiene una mayor distribución mundial, encontrándose principalmente en los océanos Pacífico e Índico tropicales.
La fragata magnífica se encuentra en el Caribe y en las costas del Pacífico y el Atlántico de América. La población de fragatas magníficas de las Galápagos se considera una subespecie endémica.
En las Galápagos, las dos especies pueden verse anidando una al lado de la otra, pero cuando se avistan fragatas en el aire, suelen ser fragatas magníficas, ya que las fragatas grandes tienden a buscar alimento mucho más lejos en el mar. Al igual que ocurre con las tres especies similares de pájaros bobos, las especies similares de fragatas evitan la competencia alimentándose en lugares diferentes.
Las dos especies de fragatas se distinguen por sus sonidos: la fragata grande emite un sonido similar al de un pavo, mientras que la fragata magnífica emite un sonido de tamborileo.
Las fragatas son grandes, de plumas negras iridiscentes (las hembras tienen el vientre blanco), con alas largas (la envergadura de los machos puede alcanzar los 2,3 metros) y cola con profundas horquillas. Los machos tienen bolsas hinchables de color rojo en la garganta, que inflan para atraer a las hembras durante la época de apareamiento.
Ambas especies de fragatas tienen una envergadura extremadamente alta en relación con su peso corporal, lo que les permite elevarse y volar muy bien y con un control excelente. Gracias a este control, las fragatas roban habitualmente la comida a otras aves agarrándolas por las plumas de la cola y sacudiéndolas hasta que regurgitan el alimento.
Como las fragatas sólo tienen una pequeña glándula sebácea y muy poca impermeabilidad en las alas, no pueden bucear y deben recurrir a sus magníficas acrobacias aéreas para capturar peces voladores.
Las fragatas no nadan, no caminan bien y no pueden despegar de una superficie plana. Al tener la mayor relación envergadura/peso corporal de todas las aves, son esencialmente aéreas, capaces de permanecer en el aire durante más de una semana, aterrizando sólo para posarse o criar en árboles o acantilados.
Para atraer a las hembras, los machos de fragata inflan su bolsa gular de color rojo brillante y caminan ruidosamente cuando las hembras pasan por encima de ellos. Las hembras eligen entonces a un macho adecuado y se posan junto a él. El macho responde desplegando sus enormes alas alrededor de la hembra para protegerla de otros machos. A continuación puede ver un breve vídeo del ritual de apareamiento de la fragata de las Galápagos.
Tras el apareamiento, se pone un solo huevo y, aunque la cría de fragata puede volar al cabo de unos cinco meses, permanece con sus padres y depende de ellos durante aproximadamente un año. Debido a esta larga inversión en cada polluelo, las fragatas sólo pueden aparearse una vez cada dos años.
Es típico ver juveniles tan grandes como sus padres esperando a ser alimentados. Cuando esperan sentados durante interminables horas bajo el sol ardiente, adoptan una postura de bajo consumo en la que la cabeza cuelga hacia abajo, y se quedan tan quietos que parecen muertos. Pero cuando el padre regresa, se despiertan, mueven la cabeza y gritan hasta que el padre abre la boca. El hambriento juvenil hunde la cabeza hacia abajola garganta de los padres y se alimenta al fin.
Foto cortesía del Dr. Hays Cummins, Universidad de Miami
Las hembras de fragata magnífica son negras, pero tienen el pecho y los lados inferiores del cuello blancos y una banda marrón en las alas. Las hembras de fragata magnífica tienen un anillo ocular azul. Las aves jóvenes tienen la cabeza blanca y las partes inferiores blancas.
Las fragatas se alimentan principalmente de peces, y también atacan a otras aves marinas para obligarlas a vomitar su comida. Las fragatas nunca aterrizan en el agua, y siempre toman sus alimentos en vuelo.
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